RESUMEN:
Convocan a una sesión extraordinaria con el fin de tratar la solicitud del Poder Ejecutivo para modificar las leyes de derechos diferenciales con el Estado Oriental. Se posicionan a favor del proyecto: el Ministros de Justicia, Culto e Instrucción Pública, el Ministro de Hacienda, Alvear, Quesada, Álvarez Condarco, González y Mansilla (acepta el proyecto pero sugiere modificar la redacción).
Argumentan que Uruguay podría colaborar en la dominación de Buenos Aires. Por lo tanto es preciso proteger nuestra política aduanera con leyes que no impidan resolver la cuestión de integridad nacional de forma pacífica, es decir, no hay que negarle al Poder Ejecutivo un medio de acción para ganar la guerra.
Quienes se oponen postulan que por más que Buenos Aires se integre a la Confederación las leyes deben seguir rigiendo para la Banda Oriental y crear otras leyes aduaneras para que Montevideo no perjudique los puertos de la Confederación. Uruguay tendría que ser el aliado natural y no esperar a regirse por convenciones. Otros consideran que la solicitud es anticonstitucional, antieconómica e inconducente al objeto de su propósito, también se plantea que no hay que sacrificar los intereses de la Confederación con la esperanza de obtener algo de los Estados vecinos.
Votan el proyecto dos veces, en ambas empatan. Lo resuelve el Presidente: vota negativo y rechazan la solicitud.